domingo, 29 de mayo de 2011


Tu vano intento no le gana a nadie.
Perdóname que te diga, que te hable con verdad,
Pero no creo que te merezcas menos.
Como te explico... ya no me duele.
He entendido como se sentía mi viejo amigo, después de decepcionarse de mi.
Estoy sintiendo exactamente lo mismo por ti.
Te caíste de tan alto.
Te rompiste la cara y ahora eres irreconocible.
No espero que te importe, mucho menos que te moleste.
Ya no espero nada de ti.
Me resulta divertido, hace un día yo ponía mis manos al fuego por tu humanidad,
Ahora ya no pongo más que tus palabras.

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